Anoche, mientras veía un montón de gente feliz, pensaba por qué no puedo hacerme las cosas más simples... eso es: por qué tengo que escoger lo más difícil, por qué tengo que buscar lo más difícil siempre. Pero qué le vamos a hacer, si fueran cosas sencillitas no me gustarían, no me interesarían, NO ME APASIONARÍAN. Casi siempre, quiero hacer cosas imposibles. Y a la larga... de pronto salen!

Desorden y Fragmentos

1. Tengo la firme intención de imponerme disciplina durante las vacaciones, para lograr hacer todo lo que quiero.

2. En estos momentos de mi vida, mi gusto por Cerati se está incrementando de manera exponencial.

3. Mi ánimo está muy bien y me siento feliz en general.

4. Por fin llegaron las anheladas y, en extremo, necesarias vacaciones.

Dos cosas que detestaba profundamente cuando era pequeña, eran:
1. Tener las manos llenas de pegotes de colbón seco
2. Sentirlas grasosas cuando hacía algo en plastilina

De la Clase de Problemas Contemporáneos

"Hay gente que cree que ganando más dinero va a vivir mejor. Pero hay gente que ganando más dinero viviría peor si sigue viviendo como vive: si es un borracho, tomaría más alcohol; si es un tipo fanático y bestial, sería aún más fanático y bestial"...
Yo, posiblemente, sería más soberbia.

Pero, por otra parte, "la gente madura y sobria está consciente de lo que es y no se sobreestima, ni se subestima"; por eso, yo mantengo los pies sobre la tierra.

"Ser comunicador social es no ser un incompetente. O, por lo menos, saber que se es un incompetente y continuar en la lucha por serlo cada vez menos". Por eso soy comunicadora!

Hoy me desperté y estaba el mar
sólo el mar con su rayo verde
Hoy desesperé y estabas vos
mi bendito golpe de suerte

Fuerte Apache, Fito Páez

Es increíble como una simple llamada telefónica puede cambiarlo todo. Pero odio sobre manera esos huecos telefónicos que se hacen entre frase y frase, en medio de situaciones algo tensas. Lo peor es esa sensación nerviosa y el apremio de pensar en algo para no dejar que se meta el hueco telefónico. No obstante, y ya superadas estas circunstancias, estoy muy feliz y no me importa mientras esas llamadas sigan trayendo de vuelta a mi vida a personas que quiero y que me hacen feliz.

Me he tomado la libertad de poner links a otros blogs que me agradan. Entre estos, algunos que han tenido la gentileza de hacer lo propio con este.

... Acabo de darme cuenta de que me he vuelto muy fría...

Entre las cosas que vuelven, volvieron anoche las famosas fiestas de colegio con la de mi hermana.

Lo curioso de la noche: que cuando estaba en el colegio no me creían que tenía 14 años… ahora me preguntan en qué curso estoy!

Lo imperdonable: que un individuo salido de quién sabe dónde pregunte “¿hace cuánto que salistes del colegio?”

Las Semanas

Las últimas dos han sido semanas difíciles, pero ganadoras, salvo algunos pequeños inconvenientes que lograron molestar bastante, pero bueno. Las personas que la embarraron esta semana y que ahora preguntan qué hicieron y, encima de todo, me hacen llegar sus quejas a través de otras, saben que no voy a cambiar por sus apreciaciones infundadas y saben qué pueden esperar de aquí en adelante. Por lo demás, he cumplido con mis obligacionea a cabalidad y contra los pronósticos de tiempo y presión. Es fin de semestre y ya solo quedan cosas que me agradará hacer o, cuando menos, no darán mayor problema. Todo parece indicar que mis deseos de no volver a ver ética, ni metodología, se cumplirán dentro de muy poco tiempo. Ahora solo espero que los otros también se cumplan, pero por el momento estoy satisfecha. Y... amanecerá y veremos.

Odio profundamente que la gente no sea capaz de decir las cosas de frente, como son. Y, peor aún, que manden razones. Son dos veces que gente muy especial para mí comete este gran error y no se dan cuenta todavía de lo difícil que me es perdonarles eso. Hay ciertas cosas que cambian sin remedio.

Mi teoría funciona. Alguna vez dije por aquí que los libros siempre meencuentran en el momento adecuado... la experiencia lo demostró, una vez más, cuando el martes de esta semana llegó a mí por casualidad 1984 de George Orwell. Muy por casualidad, pero llegó cuando tenía que llegar!

Antes que nada, el descuido de estos días en la actualización se debe a que hay un daño en la línea telefónica desde hace varios días. Hay bastantes cosas por decir, lo único que espero es poder recordarlas... Y bueno, espero que las cosas vuelvan a la normalidad lo antes posible. En estos momentos solo puedo decir: maldición!