Tuesday, July 22, 2003

No hay como despertarse de una pesadilla y darse cuenta de que no era más que eso y que todo está bien, como uno lo dejó al dormirse. La situación contraria, en la que uno se despierta en la mejor parte de un buen sueño y se lamenta de que sólo haya sido eso, también existe. No obstante, no cambiaría lo primero, ni siquiera por que se cumpliera uno de esos sueños. Ahora que lo digo, la otra noche soñé algo horrible y, en eso, pensaba que ojalá fuera un sueño y me acordaba de las situaciones desagradables de la vida en las que he deseado que todo sea un sueño pero me doy cuenta de que no lo es. Entonces en el sueño trataba de establecer si efectivamente lo era. Sin embargo, era muy real aunque sentía que sí estaba soñando. Hasta que, finalmente, me desperté y lo comprobé.