No, no, no, que no se malinterprete. Detesto la mayoría de dichos, pero no son todos. Hay unas expresiones que me parecen verdaderamente de antologia, pero hay unos que, por mí, se pueden ir a los áticos del subconsciente colectivo. Puede ser que hable de eso en detalle después. Por ahora no hay energía, ni disposición anímica e intelectual.