Thursday, June 24, 2004
Porque sí… porque ahora voy para allá y ni siquiera sé qué va a pasar más tarde. Porque hoy amanecí feliz y mi Dieguito mejora después de todo lo que ha pasado. Pero a la tarde me sobrevino esta extraña depresión fundida, ese vacío desalentador que me deja sin genio, esa carencia de ideas y de propósitos, este sol que se desliza sobre mi cabeza, esta sensación de que ni todo el aire de un lugar abierto es suficiente porque me sigue faltando, esta distancia eterna que me desconecta, esta expresión de indiferencia alejadora, buscando fragmentos de tiempo perdido, pensando que otra vez es tarde… siempre es tarde para ir allá. Porque no… porque no puedo llorar, porque no puedo reírme, porque no puedo gritar, porque no quiero moverme.